La radiología no es sólo buscar el diagnóstico con técnicas de
imagen (Radiodiagnóstico). En muchos servicios de Radiodiagnóstico se realizan
técnicas intervencionistas (Radiología intervencionista). Estas técnicas se
caracterizan porque se hace algún tipo de procedimiento invasivo sobre el
paciente, ya sea una biopsia con una aguja, una arteriografía mediante la
introducción de un catéter en una arteria o un drenaje de una colección de
pus en diferentes localizaciones del cuerpo.
En muchos servicios hay salas específicas para realizar las
pruebas más complejas de radiología vascular e intervencionista. Estas salas,
además de tener un equipamiento específico, se parecen a quirófanos, en el
sentido de se toman las mismas medidas de higiene sobre el paciente.
A mediados de los años 70 el desarrollo de la radiología
intervencionista se extendió simultáneamente a diferentes campos, comenzando
por la angioplastia y abarcando diferentes territorios.
Posteriormente varios doctores contribuyeron a la mejora de las
técnicas intervencionistas introduciendo numerosas aplicaciones y dispositivos
muy innovadores en radiología urológica e intervencionista no vascular. Se ha
hecho un buen trabajo en el campo biliar, con el acceso percutáneo y la terapia
antitumoral.
Más recientemente ha habido grandes innovaciones, entre las cuales
es de destacar la endoprótesis metálica, que posibilitó el implante de
endoprótesis en arterias. Se ensayó el uso combinado de endoprótesis metálica y
un tejido impermeable para el tratamiento de aneurismas artificiales.
En la actualidad existen diferentes técnicas que nos permiten
tratar tumores en radiología intervencionista, como embolizadores,
quimioembolizadores, terapias de infusión o ablaciones tumorales mediante
radiofrecuencia o crioablación.
Los avances científicos y la introducción de los ordenadores
integrados en los sistemas de captación de imágenes han hecho posible la
obtención de imágenes diagnósticas diferentes así como fuentes de energía
diferentes, disminuyendo el tiempo tanto en la angiografía diagnóstica, como en
los tratamientos terapéuticos, y utilizando en algunas ocasiones otros medios
para diagnóstico de las patologías vasculares y no vasculares.